Cerámica Verde

The art of Shipibo

Venimos de un sueño que navega por el río Ucayali; sus orillas forman un mapa imposible de torrentes, lianas, raíces, manantiales… senderos trazados en el aire que recorren el infinito de las aguas, las tierras, los vegetales… Un universo de universos, lleno de diferentes formas de vida, cada una con su lenguaje y su hacer.

Nuestros ancestros recorrieron esos caminos hasta llegar tan lejos, que sólo se les ve algunas noches de tiempo en tiempo. Desde allí nos siguen hablando y escuchando; conversamos sobre nuestras vidas y visiones, sobre nuestras necesidades y caminos.

 

The art of Shipibo

Venimos de un sueño que navega por el río Ucayali; sus orillas forman un mapa imposible de torrentes, lianas, raíces, manantiales… senderos trazados en el aire que recorren el infinito de las aguas, las tierras, los vegetales… Un universo de universos, lleno de diferentes formas de vida, cada una con su lenguaje y su hacer.

Nuestros ancestros recorrieron esos caminos hasta llegar tan lejos, que sólo se les ve algunas noches de tiempo en tiempo. Desde allí nos siguen hablando y escuchando; conversamos sobre nuestras vidas y visiones, sobre nuestras necesidades y caminos.

 

Las aguas y tierras cambian siguiendo esos caminos; se entrecruzan en complejos ciclos y direcciones. En la imperceptible vorágine aprendimos a leer en la piel de la anaconda las lluvias y las estrellas, las noches y los vientos.

Hay épocas de silencio y exclusión, como periodos de alegría en que los puentes entre los mundos se abren. Podemos tocar con las manos la luna y pararnos en el sol; ir y volver en un cometa, viajando en la cambiante velocidad de la luz. A veces en la soledad se perciben relaciones imposibles de definir… Mantenemos nuestros sueños dibujando el universo y sus laberintos.